Si me hubieran preguntado hace 10 años cómo describiría a alguien que acaba de cumplir 30, seguramente hubiera dicho que se trataba de un ser humano con absolutamente todos los problemas de la vida resueltos, maduro, centrado y muy probablemente con una familia.
Hoy, ya más cerca del terrorífico tercer piso, me doy cuenta de lo alejada que estaba esa idea de la realidad. No me malinterpreten, jamás me gustaría regresar a tener 20, pero sí hay algunas cosas que necesitamos tener en mente todos los que nos estamos acercando a los “tas”.
1.- Las responsabilidades no son tan espantosas como creíste.
Sí, hay que pagar la renta, y entender qué es exactamente lo que quiere el SAT de tí, pero la libertad de hacer lo que te gusta sin responderle a nadie es invaluable.
2.- Cuidar tu piel ya no es opcional.
Las arrugas y las manchas no entienden tu espíritu de quinceañera, llegan y punto. Empieza a usar sueros nocturnos, negar el paso del tiempo es inútil.
3.- Tu cuerpo te empezará a gustar cada vez más.
Empieza la temporada de verte en el espejo y decir “How you doin’”. Adiós inseguridades de la pubertad, nada como querer tu cuerpo y apreciar lo que tienes.
4.- Empezarás a experimentar crudas de 2 días.
Enough said.
5.- Hacer un triatlón o correr una carrera ya no parece tan mala idea.
Muchos de tus amigos se empiezan a interesar por el deporte, los más fiesteros se transforman en triatletas y maratonistas. El gym te empieza a gustar cada vez más, y los desayunos domingueros post-carrera se empiezan a volver parte de tu rutina.
6.- Tu círculo de amigos se empezará a hacer cada vez más chico.
Tus amigas cercanas se harán más cercanas, y tendrás cada vez menos “conocidos”. Disfrutarás más pasar tu tiempo libre con la gente que de verdad te importa y te hace feliz.
7.- Necesitas dejar de juzgar a otras mujeres.
Concéntrate en tí, en lo que te hace feliz y en hacer feliz a otros.
8.- Aprovecha la libertad que te da tener un trabajo y algo de dinero para tus “lujitos”
9.- Ahorra.
Las decisiones financieras que tomes ahorita tendrán repercusiones en tu futuro, y definirán qué tan fácil o difícil será tu vida después.
10.- No tendrás tu vida resuelta para cuando cumplas 30.
Algunas cosas empezarán a tomar forma, pero la mayoría de tu vida seguirá siendo un descubrimiento constante. Aprende y crece, aunque estés a punto de cumplir 80.
